miércoles, 13 de marzo de 2013

EL DOCTOR DELGADO


Donostiarra de nacimiento, Claudio Delgado de Ameztoy vino a este mundo el 8 de noviembre de 1843, en el cuarto piso de la casa número 9 de la calle Mayor. Quedó huérfano temprano, y entonces vivió en casa de una señora en el número 31 de la calle 31 de Agosto. Fue a la escuela pública en la que no sobresalió por sus cualidades intelectuales. El maestro señor Barrenechea, más conocido por los donostiarras de la época por "Maisu Chikiya", solía decirle: "Claudio, tú nunca serás nada. Pasas la vida en el muelle viendo los veleros y cogiendo azúcar y café de los sacos que descargan.¡Marcha a América!".
Y se fue a Cuba en aquellos bergantines de hace siglo y medio. Pensaba colocarse de dependiente de alguna tienda, y en ella ascender a contable y luego a gerente, y tal vez casarse con la hija del patrón. En Cuba empezó a estudiar y el 20 de noviembre de 1874 recibía el título de Licenciado en Medicina por la Universidad de La Habana.
Un historiador de la época escribió de él que la labor que desarrolló fue enorme. "Dirigió hospitales, saneó tierras, puso en marcha varios planes de sanidad. La fiebre amarilla con sus estragos sometía al Doctor Delgado a fuertes pruebas que le impelían a pensar acerca de un posible medio para acabar con ella".
Hacia 1880 conoció al doctor Carlos Finlay, médico, hijo de un inglés y una francesa, que trataba de luchar contra la fiebre. Delgado le dió los datos que poseía y comenzaron a estudiar. En 1885 ambos eran proclamados como los reyes de la bacteriología en Cuba. Investigaban día y noche, descubrieron que la fiebre amarilla hacia estragos en Cuba y en toda América mucho antes de que Colón pusiera los pies en ella. Los focos se hallaban en las tierras bajas y en los puertos, ya que rara vez ocurría la epidemia a más de 1.300 metros de altitud. Hasta 1870 se habían registrado en Nueva York veintitrés epidemias graves y en Río de Janeiro una epidemia había matado al 94% de los atacados.
Finlay y Delgado se pasaban días y días con el microscopio binocular escrutando muestras de sangre de enfermos, hasta que llegaron a la conclusión que la fiebre era causada por un mosquito que no vivía en la altura, el mosquito "Aedes aegypti". Dieron a conocer su descubrimiento y se comenzó a combatir , tanto en Cuba como en EE.UU. al "mosquito doméstico".
El nombre de Claudio Delgado y sus descubrimientos fueron pronto conocidos en el mundo científico y en un viaje que hizo a España en 1916 murió repentinamente el día 13 de julio. Fue una gloria científica, al que el Ayuntamiento de San Sebastián dedicó una calle en 1925.

1 comentario:

  1. Claudio Delgado Amestoy


    Científico donostiarra. Nacido en Donostia-San Sebastián el 8 de noviembre de 1843.
    Desestimando el comercio en La Habana a donde se había trasladado, se dedica a los estudios de medicina, por los que sentía vocación, que terminó en 1874.


    Allí obtuvo premios en historia natural, anatomía, patología general e higiene privada. Durante los años 1875 y 1876 fue médico-director del Hospital de Higiene "Casa Quinta de San Antonio". En 1878 fue secretario fundador de la Sociedad de Socorros Mutuos; en 1879, archivero y bibliotecario de la Sociedad Antropológica, y desde 1879 a 1881, secretario fundador de la Sociedad de Estudios Clínicos. En 1879 cursó el doctorado. En 1881 era miembro de la Comisión de Fiebre Amarilla. Desde 1883 la Real Academia de Ciencias Médicas de La Habana le nombra socio numerario y después secretario de la sección de Ciencias.

    Entre los estudios que la Real Academia registra, figuran algunos tales como uno sobre conteo de la sangre, sobre explosión de una caldera, sobre las investigaciones del Dr. Ferrán concernientes al cólera, sobre un caso de perineorragia por el método Emmet, sobre las condiciones del agua potable destinada al Lazareto de Mariel, sobre un producto fluido empleado en la fabricación del azúcar y de su acción sobre la economía humana, sobre d establecimiento de una industria de ostras en d litoral cubano, sobre la comiasis biliar, y acerca de la instalación de un laboratorio bacteriológico.

    En 1888 colabora en el descubrimiento de la fiebre amarilla con el Dr. Finlay. Así se ha reconocido que los fundadores en Cuba de la Bacteriología fueron desde el año 1885 los Dr. Carlos Finlay, camagüeyano, y Claudio Delgado, donostiarra. La primera sala de asepsia y antisepsia establecida en Cuba en el Hospital de Higiene, se debe al Dr. Delgado y fue este doctor donostiarra el primero que practicó en Cuba la transfusión de sangre.

    De todos modos, además de la colaboración con d Dr. Finlay, su trabajo fue tenaz para la extirpación de la fiebre amarilla o vómito negro. Ambos investigadores, Finlay y Delgado sufrieron la rechifla de sus colegas médicos que les llamaban los "mosquiteros" entre los años 1891 y 1898. Así y todo los dos sabios continuaban sus trabajos. El Dr. Finlay le habla cariñosamente en sus cartas a Delgado de "nuestro mosquito", el de la fiebre. El reconocimiento del descubrimiento ocurrió en 1901. En el discurso de Finlay en el banquete que se le ofreció cuenta de cómo él y Delgado descubrieron un grueso diamante con apariencia de piedra tosca y grosera encontrada en un campo yermo y desconocido. En 1903 presentó al Congreso Médico Internacional de Madrid un informe relativo al descubrimiento del mosquito portador de la fiebre amarilla. Colaboró activamente en las revistas cubanas Anales, Crónica médico-quirúrgica de La Habana y Revista de Ciencias Médicas. Falleció el 13 de julio de 1916. Su nombre lo ostenta una calle del barrio de Gros de Donostia-San Sebastián.

    BERNARDO ESTORNÉS LASA - AUÑAMENDI EUSKO ENZICLOPEDIA

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